viernes, 29 de enero de 2010

Escribir y dibujar

A veces cuando un ilustrador se dedica tan solo a dibujar, se a de basar en un mundo bastante ajeno a él. A de adaptarse al mundo del autor y hacerlo propio, esto parece bastante sencillo. Pero no lo es, a veces el escritor tiene una idea diferente a la que le dibuja el ilustrador. Y puede llevar al ilustrador, a tener que dibujarlo todo de nuevo.
Cuando un ilustrador escribe un texto para luego ilustrarlo, crea el texto a partir de su visión de la historia. Este trabajo es el que suelo hacer en mis cuentos, primero visualizo como va a ir la historia, empiezo a dibujar los personajes y escribo el texto simultáneamente. Incluso puedo ir determinando que colores voy a utilizar en las ilustraciones.
Con esta ventaja (o desventaja, según quien lo mire) puedo estar pensando varios cuentos a la vez, a veces te trabas en algún punto de la historia y no sabes por donde tirar. Y otras veces, puedes estar haciendo una historia a buen ritmo y te surge una nueva idea que empiezas a esbozar.
Vale la pena intentar hacer un par de cuentos uno mismo, es una forma de ponerse a prueba.

No hay comentarios:

Publicar un comentario