En la imagen de abajo, veréis los primeros dibujos que empecé a trazar con los pinceles. Intentando controlar los grosores de línea y las texturas que deja la aguada, se puede conseguir un efecto de profundidad en la imagen.
Las hojas del bambú quedan un poco gruesas, pero al ir practicando con el pincel van ganando forma esbelta. Es interesante ir viendo como la tinta va dejando diferentes texturas cuando vas trazando las diferentes partes. También podéis probar de hacer un poco de sombra con el pincel en los bambús que tenéis en primer plano. Quedan texturas muy visuales y refuerza el estilo de la imagen.
Aquí muestro (foto de arriba) una de las texturas que más me han gustado de estos primeros bambús a tinta, ¿Qué os parece?
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