A veces caemos en el error de pensar, que hay unos materiales más profesionales que otros para dibujar.
En mi vida he probado bastantes herramientas, de las cuales, mis favoritas son las más sencillas. Me gusta mucho el lápiz, sobretodo porque puedo trabajar el volumen. Las plumas; desde estilográficas sencillas a las plumillas de tintero. Pasando por el boli de tomar apuntes, esto es todo un mundo. Hay marcas más dadas a soltar tinta cuando trazas en plan dibujo y te hacen manchurrones, otras que no te esperas que respondan bien a tus movimientos manuales, te sorprenden de grata manera.
Dibujar a bolígrafo tiene también sus inconvenientes; debes de evitar equivocarte, corregir el error es difícil. También es importante que vayas probando muchos tipos de bolígrafo hasta que encuentres uno que se adapte a tu forma de dibujar.
Desde mi punto de vista, trabajar a bolígrafo es una buena experiencia que vale la pena experimentar.